Los láseres de dióxido de carbono (CO2) siguen siendo un instrumento importante para la cirugía de tejidos blandos por su excelente afinidad con los tejidos a base de agua. La longitud de onda de 10.600 nm se absorbe fácilmente en el agua , por lo que no penetra mucho en los tejidos (0,1-0,23 mm) sin un uso repetido o prolongado, lo que la hace ideal para lesiones superficiales y rejuvenecimiento de la piel. También se utiliza para la eliminación de los sialolitos.
Los láseres Nd:YAG (1064 nm) se utilizan para la depilación, además de para la eliminación de tatuajes y lesiones pigmentadas si se utiliza el sistema q-switch. Nd:YAG y
Ho:YAG (2,12 µm) se utilizan con frecuencia en la ablación de huesos y cartílagos.
Los láseres Ho:YAG se utilizan para adherencias y eliminación de cuerpos extraños mientras se tratan irregularidades articulares y se realiza discectomía del disco perforado.
Los láseres Er:YAG (2,94 µm) se han convertido en los láseres más populares para el tratamiento de tejidos duros, dientes y huesos. El láser Nd:YAG o KTP de frecuencia duplicada (532 nm) se absorbe fuertemente por la hemoglobina, la melanina y otros pigmentos similares que se utilizan para el tratamiento de la telangiectasia.
y cicatrices queloides si se cambia con q.
Los láseres de Alejandrita (720-800 nm) se utilizan para la depilación y la eliminación de tatuajes, si tienen conmutación Q, al igual que el láser de rubí (694 nm) y el láser de tinte (400-1000 nm).
Los láseres de argón (488, 514 nm) y criptón (531 nm) son fácilmente absorbidos por la hemoglobina, la melanina y otras pigmentaciones similares y son útiles en el tratamiento de las manchas de vino de Oporto. Los láseres de argón, KTP, Nd:YAG y diodo se utilizan para tratar lesiones orales blandas y/o vasculares mediante ablación, incisión, escisión o coagulación. El láser excimer (salidas UV) es absorbido por proteínas y se utiliza principalmente en cirugía oftálmica.